La ronda 20 de la temporada, el Gran Premio de la Ciudad de México, se llevó a cabo en el Autódromo Hermanos Rodríguez. Max Verstappen, del equipo Oracle Red Bull Racing, apoyado por Honda como Team Partner, ganó la carrera. Mientras que Sergio “Checo” Pérez, del mismo equipo, se retiró.
El piloto de Scuderia AlphaTauri, Daniel Ricciardo terminó 7º, Yuki Tsunoda finalizó 12º.
Max Verstappen avanzó desde la tercera posición en la parrilla, se coló entre los dos Ferrari, avanzando a Leclerc y Sainz y situándose a la cabeza de la carrera. Con esta ingeniosa maniobra, se gestó su dieciseisava victoria, anotando un récord en una misma temporada de Fórmula Uno, a la vez que logró la quinta victoria de su carrera en México. Max afirmó que ni en sus mejores sueños podía haber imaginado alcanzar 16 victorias en una misma temporada.
Sergio “Checo” Pérez intentó una maniobra similar con una valiente salida, pero su rueda chocó con la de Leclerc y el piloto mexicano quedo fuera de la carrera en la primera vuelta. La rápida salida en la que Pérez pasó de la quinta a la tercera plaza, truncó la esperanza de ganar ante su público. El piloto mexicano lamentó no haber podido dar el espectáculo que muchos fans que asistieron al circuito esperaban, como en los dos grandes premios anteriores, donde “Checo” subió al podio.
Daniel Ricciardo, de la Scuderia AlphaTauri, terminó séptimo para coronar un excelente fin de semana para el australiano, después de un sorprendente cuarto lugar en la parrilla de salida. La bandera roja por el accidente de Magnussen impidió que el piloto de Alpha Tauri pudiera mantener el ritmo que se había impuesto para permanecer en los primeros puestos. Por su parte, el piloto japonés Yuki Tsunoda cerró una discreta carrera al quedar cerca de los puntos.
Sergio “Checo” Pérez 11 – Oracle Red Bull Racing
“Realicé una salida espectacular, probablemente la mejor del año, la diferencia estaba ahí y si no apuestas todo, ¿qué sentido tiene estar aquí? Lo hice y no esperaba que Charles frenara tan tarde como lo hizo y, sencillamente, no había espacio para tres vehículos. Tenía muchas ganas de ganar y sabía que era arriesgado, pero si hubiera funcionado, habría acabado primero. En el Gran Premio de mi país, después de haber subido dos veces al podio, quería darlo todo, y lo intenté con todas mis fuerzas; hoy quería ganar de verdad. Me voy a casa triste, pero orgulloso de mí mismo y de mi equipo porque lo dimos todo, así son las carreras y así es como funciona a veces este deporte».