
La plataforma Pitz diseñada para la industria automotriz en América Latina y que fue creada por una ex Rappi, anunció el cierre de una ronda de inversión pre-semilla por USD $2.1 millones. Esta inversión fue liderada por fondos de alto impacto como BFF, Marathon, Cracks Fund de Oso Trava, 500 Startups, Amplifica, Boost VC, AngelHub y Latitud.
La ronda, que se cerró en tan solo dos meses, marca un hito no solo para Pitz, sino para el ecosistema emprendedor en la región. La startup, liderada por la emprendedora Natalia Salcedo Franco, invertirá este capital para consolidar sus operaciones en México y Brasil, continuar con el desarrollo tecnológico de su ecosistema y formalizar su expansión hacia otros países de América Latina y Estados Unidos.
“Cerrar esta ronda no es solo conseguir capital: es demostrar que una fundadora sola, mujer y latina puede levantar una de las rondas pre-seed más grandes de la región en un sector históricamente masculino. En un ecosistema donde menos del 2% del capital de venture en LatAm llega a startups lideradas únicamente por mujeres, Pitz está construyendo la infraestructura de IA para digitalizar a más de 750,000 talleres mecánicos en México y Brasil y hacer posible que cualquier auto se repare en menos de 24 horas” comentó Natalia Salcedo Franco, fundadora y CEO de Pitz”.
Pitz destinará la inversión a consolidar sus operaciones en México y Brasil, desarrollar tecnología específica para la industria automotriz independiente, expandirse hacia nuevos países de latinoamérica de manera estratégica y paulatina y alcanzar a más de 2.500 talles activos en los próximos 12 meses.
Lo que viene en los próximos meses es innovación y nuevos productos. Los mecánicos podrán tener su propia página web en menos de 10 minutos, más de 15 recomendaciones automáticas como reordenamiento de piezas, cierre de cotizaciones y alertas por autos retenidos; y de 500 a más de 5,000 interacciones de voz semanales proyectadas en tres meses.
Pitz no solo está construyendo tecnología. Está creando la infraestructura inteligente para una industria que por años ha sido olvidada por la digitalización, poniendo en el centro al mecánico independiente, al emprendedor de barrio, y a los millones de conductores que necesitan su auto listo, y rápido.